Una pequeña sorpresa
Patucos de bebé y tartas de pañales: los baby shower son una moda en EE. UU. que se está imponiendo también en nuestro país. En estas fiestas, la futura mamá invita a sus amigas, se hacen numerosos regalos y se organizan distintos juegos en torno al bebé.
Sin embargo, si las visitas de la cigüeña siempre se reducen al mismo círculo de amigas, con el tiempo, las típicas fiestas del bebé pueden resultar algo aburridas. Esto fue lo que dio a Linda la idea de organizar, en lugar de la clásica celebración, un día de reforma en el que transformarían la habitación de invitados de su amiga embarazada Anna en el dormitorio infantil para el bebé. Linda convocó a sus mejores amigas para darle un nuevo aire a la fría estancia y convertirla en una habitación infantil de ensueño. Por la mañana se planificó la reforma, por la tarde se le enseñaría la habitación a Anna y como colofón, el día terminaría con una pequeña fiesta.
«La reforma de la habitación va a ser una sorpresa para Anna», contó Linda. «Sin embargo, la idea general, la elección de colores y los patrones utilizados, no. Hemos hablado mucho con Anna para averiguar cuál es el diseño que tiene pensado para la habitación. Además, se ha creado un tablón en Internet en el que ha ido recopilando las imágenes, colores y patrones que le gustan. Nosotras también lo hemos visto para averiguar el diseño que Anna quiere que tenga la habitación del bebé».
