¿Pulverizar un techo, en lugar de pintarlo con un rodillo y una brocha? ¡Así de fácil es con un dispositivo Airless!
Pulverizar un techo resulta enormemente trabajoso: se sufren salpicaduras en los ojos, el cuello duele y, con el paso de las horas, los brazos se sienten pesados. El trabajo es más sencillo utilizando un dispositivo de pulverización; y no solo es más rápido, sino que, además, apenas requiere esfuerzo. Usted ahorra tiempo, fuerza y materiales, lo que se traduce en un ahorro de dinero.